La cistitis es una inflamación de la vejiga que provoca dolor al orinar. La cistitis suele ser causada por una infección bacteriana que también causa infecciones del tracto urinario.
La cistitis es más común en las mujeres. Esto sucede porque la abertura urinaria de la mujer (uretra) es más corta y está ubicada más cerca del ano, por lo que se contamina fácilmente con bacterias del ano. El riesgo será mayor si estás acostumbrado a limpiar la zona genital o lavarte el cabello de atrás hacia adelante.
Causas de la cistitis
Cistitis es un término que describe la inflamación en la vejiga. Esta condición puede ser causada por infecciones y no infecciones.
La cistitis debida a una infección, también conocida como infección de la vejiga, es causada con mayor frecuencia por la bacteria E. coli. En realidad, esta bacteria es normal y no es peligrosa si se encuentra en los intestinos. Sin embargo, si ingresa a la vejiga, esta bacteria puede causar inflamación.
Mientras tanto, la cistitis no infecciosa generalmente es causada por daño o irritación de la vejiga. Esto puede desencadenarse por el uso prolongado de un catéter urinario, la actividad sexual, los efectos secundarios de la radioterapia o la quimioterapia, así como por sustancias químicas irritantes, como los espermicidas.
Un tipo de cistitis no infecciosa cuya causa exacta aún no se conoce es la cistitis intersticial o síndrome de dolor de vejiga. Esta inflamación de la vejiga puede provocar dolor en la vejiga durante mucho tiempo.
Factores de riesgo de cistitis
La inflamación de la vejiga la experimentan con mayor frecuencia mujeres sexualmente activas o en luna de miel, que usan anticonceptivos de diafragma o espermicidas, están embarazadas o han pasado por la menopausia.
Aparte de eso, los siguientes factores también pueden aumentar el riesgo de cistitis:
- Tener la costumbre de limpiar la zona íntima desde el ano hasta los genitales, es decir, de atrás hacia adelante.
- Sufrir una enfermedad que bloquea el flujo de orina, como cálculos en la vejiga, cálculos renales, infecciones del tracto urinario o agrandamiento de la próstata.
- Experimentar incontinencia urinaria debido a una lesión de la médula espinal
- Sufriendo de diabetes
- Usar jabón que pueda irritar los órganos íntimos, como el jabón perfumado.
- Uso de un catéter urinario a largo plazo
- Someterse a radioterapia o quimioterapia en el área pélvica.
- Tener un sistema inmunológico débil, por ejemplo debido a sufrir una infección por VIH.
Síntomas de cistitis
Los síntomas de la cistitis pueden variar para cada paciente. Sin embargo, en general, la inflamación de la vejiga en adultos provocará síntomas en forma de:
- La frecuencia de la micción aumenta, pero la cantidad de orina excretada es pequeña.
- Dolor o ardor (como ardor) al orinar
- Calambres en la parte inferior del abdomen.
- La orina está turbia o tiene un olor fuerte.
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Orina con sangre
- Débil
- Fiebre
Mientras tanto, la cistitis en niños puede caracterizarse por los siguientes síntomas:
- Fiebre alta
- Mojar la cama o orinar con frecuencia
- Dolor de estómago
- El cuerpo se siente débil
- Más quisquilloso que de costumbre
- Apetito reducido
- Vomitar
Cuando ver a un medico
Consulte a un médico de inmediato si usted o su hijo experimentan síntomas de cistitis como los mencionados anteriormente, especialmente si no mejoran en 3 días.
- Orina con sangre
- Dolor de espalda severo
- Fiebre y escalofríos
- Náuseas y vómitos
También debe consultar a un médico si experimenta cistitis recurrente. Si le han diagnosticado cistitis, siga el tratamiento indicado por el médico y realice controles periódicos según el cronograma indicado.
Diagnóstico de cistitis
Para diagnosticar la cistitis, el médico hará preguntas sobre los síntomas y el historial médico del paciente. A continuación, el médico realizará un examen físico que incluirá las zonas del estómago, la espalda y la cintura.
El médico también realizará los siguientes exámenes de apoyo para confirmar el diagnóstico:
- Análisis de orina, para detectar sangre, glóbulos blancos, bacterias o nitritos en la orina, lo que puede indicar una infección.
- Cultivo de orina , para detectar el tipo de bacterias o microorganismos que causan la cistitis
- Cistoscopia, para comprobar el estado de la vejiga y detectar si hay o no inflamación de la vejiga.
- Ultrasonido, para ver la estructura de la vejiga y descartar otras causas, como tumores en la vejiga.
Tratamiento de la cistitis
El tratamiento de la cistitis depende de la gravedad y la causa. La cistitis leve generalmente se puede curar sin tratamiento y solo necesita tratamiento independiente.
Cuidados personales
En la cistitis leve, existen varios tratamientos independientes que los pacientes pueden realizar para reducir los síntomas de la cistitis, a saber:
- No contenga la orina.
- Beba mucha agua para ayudar a limpiar las bacterias u otros microorganismos de la vejiga.
- Comprima el estómago con agua tibia para aliviar el dolor y el malestar estomacal.
- No utilice jabón que pueda irritar los órganos íntimos.
- No tengas relaciones sexuales hasta que estés completamente curada.
Medicamentos
Si la cistitis no mejora después del autotratamiento, el médico puede recetarle medicamentos para tratar la infección, prevenir complicaciones y aliviar las molestias.
La cistitis causada por una infección bacteriana se tratará con antibióticos, como fosfomicina, cefprozil o ciprofloxacino. El médico ajustará el tipo y la dosis de antibióticos al tipo de bacteria y a la gravedad de la cistitis que experimente el paciente.
Es importante recordar seguir las instrucciones de uso, duración de uso y dosis de antibióticos que le indique el médico. No deje de tomar antibióticos sin antes consultarlo con su médico, incluso si los síntomas de la cistitis han desaparecido.
Para reducir el dolor y el malestar que siente el paciente, el médico también le recetará medicamentos, como paracetamol o ibuprofeno.
Complicaciones de la cistitis
La inflamación de la vejiga rara vez causa complicaciones si se trata de manera rápida y adecuada. Sin embargo, la cistitis que no se trata o que se trata demasiado tarde puede provocar las siguientes complicaciones:
- Infección renal (pielonefritis)
- Fallo renal agudo
- absceso renal
- Septicemia
Prevención de cistitis
La cistitis se puede prevenir haciendo lo siguiente:
- No contenga la orina.
- No limpie los órganos íntimos con jabón perfumado.
- No utilice polvo en órganos íntimos.
- No te apresures al orinar, porque esto puede impedir que la orina salga por completo.
- Utilice anticonceptivos según sea necesario, limite el uso de diafragmas y espermicidas si ha experimentado cistitis.
- Acostúmbrate a orinar después del sexo.
- Adquiera el hábito de limpiar la zona genital de adelante hacia atrás.
- Use ropa interior de algodón, no use ropa ajustada y cámbiela todos los días.
- Beba cantidades suficientes de agua, al menos 8 vasos al día.